🟠 Tirando de un hilo...

Enfoque Personal #100

Hoy, las tres secciones de esta newsletter (tecnología, productividad y vivencias personales) se van a fundir en una sola. A ver cómo me sale 🤗

Como he comentado ya en algunos podcasts, mi mujer, Rocío, ha dejado el despacho en el que estaba y a partir de ahora desempeñará su labor profesional como abogada desde casa. Eso supone que ha traído consigo un montón de cosas que tenía en su despacho y que tenemos que buscarles acomodo, un nuevo hogar o el contenedor del color adecuado.

Estamos ya en una fase muy avanzada del proceso y el viernes por la tarde sobre la mesa del salón tenía a mi disposición la parte tecnológica de la operación. Papeles, cables y CDs fueron reciclados, pero guardé la versión retail de macOS X Leopard, y tuve que contarle a mis hijos que en aquellos tiempos los sistemas operativos se compraban. También ha venido de vuelta un teclado USB de Apple anterior a los Magic Keyboard, un teclado completo que incluye dos conectores USB 1.1. y que se va para el trastero. Allí había otro igual hasta hace poco que me he llevado a la oficina, así que este se queda con nosotros, porque nunca sabes cuándo lo vas a necesitar.

El Magic Keyboard y Magic Mouse, como ya tienen sus análogos aquí en casa, se los queda mi hija, que hasta ahora tenía para su Mac mini un Logitech K380 y un ratón Microsoft Arc, dos dispositivos fenomenales que también se van al trastero, porque Emilio ya está empezando a pedirnos un ordenador y quizá tengan que volver pronto. Como el sábado se puso un poco pesado, le monté en su escritorio el iBook G3 Azul que tenemos por aquí. Quedé gratamente sorprendido de que el ordenador se encendiera sin problemas y se mostrara funcional; es una lástima que por la senectud de su tarjeta Wi-Fi sea incapaz de conectarse a Internet y por tanto no me sirviera para entretener a mi hijo más allá de unos minutos. “El pasado da vergüenza” dijo el mameluco al contemplar el mítico cargador de yoyó del iBook, sin reconocer que estaba ante uno de los equipos más míticos de la Historia de la Informática Personal 😅

El mítico cargador yoyó de los iBooks originales

Tenemos cosas que discutir en casa, pero quizá una de las situaciones que puedan darse es que el Mac mini i7 (2012) de mi hija vaya para Emilio y que ella herede el MacBook Air de mi mujer. Rocío se quedaría bien mi MacBook Pro 16’ Intel bien un nuevo MacBook Air 13’. No quiero que mi MacBook 12’ entre en la rotación, porque es un ordenador que me gusta seguir usando con frecuencia. Aparte de todo esto, Isabel necesitará una mesa en su habitación de 60 o 70 de fondo; en la actual, de 50, no es ya que el teclado y el monitor no quepan bien, es que en cuanto abre un libro o una libreta ya apenas puede hacer nada más. Creo que el entorno es un factor determinante a la hora de la productividad; el espacio, la luz y factores “ambientales” (fotos, plantas y otros aderezos) son para mí tan importantes como la captura o la revisión semanal.

Cuando se acomete una operación como esta de recibir en casa todo lo que traía Rocío del despacho, resulta imprescindible una planificación. Rocío la tenía (por supuesto) y la hemos ido siguiendo, pero el viernes por la tarde perdí un poco el control. Es como cuando empiezas a tirar de un hilo que te sale del jersey y acabas sin jersey. Lo único que tenía que hacer era decidir qué hacer con su teclado, su ratón y dos o tres cables, y acabé haciendo un recuento y modificación total de casi todos los cajones de tecnología que tengo en el estudio, con un nivel de desmelene que nos ha tenido la casa en ala hasta ayer por la noche. Sigo sin saber qué hacer con los cuatro discos externos de 500GB que en su momento usábamos para Time Machine, pero al menos ahora sé dónde los tengo y dónde están sus cables.

En una parte de este proceso pedí ayuda a mi hija Isabel, y ahora tenemos en un único cajón todos los cargadores de casa (sin contar los de los portátiles en uso). Hemos contado 3 cargadores USB-C 20W de Apple, 5 cargadores USB-A 10W de Apple, 1 cargador USB-C 29W de Apple (el de mi MacBook 12’) y 1 cargador USB-C 30W de Anker. A esto hay que sumar 2 cargadores con su cable microUSB y un número ingente de cables de USB-A a Lightning y de USB-C a Lightning. No tengo en cuenta otros cables, cargadores y bases de carga que están “en servicio” por la casa. Espero que después de esta recopilación nadie nunca vuelva a tener ningún problema para cargar nada.

Ahora mismo me encuentro en una situación de euforia doméstica, comparable a la que he sentido esta semana tras terminar de migrar mi sistema GTD a ARC (tal y como cuento en el último Weekly). El nuevo sistema productivo me anima a trabajar más y mejor y la nueva ordenación en casa me da más sensación de confort y me lleva a preguntarme por qué no había hecho todo esto antes. La respuesta es “la vida”, en mi caso mis trabajos, los de mi mujer, el colegio de los niños, la extraescolares, la compra, el menú semanal, los compromisos sociales de los niños, las reuniones familiares… todo eso que nos impide pensar si quiera en hacer un hueco en la agenda para darle un repaso profundo a una de las cajoneras de casa… hasta que la cajonera se abre paso y el hueco se hace solo, inundando tu fin de semana como el agua que mana tras el dique que vence. En cuanto decida dónde guardar 4 cables de red cat 5 y 6 que ha surgido de la nada, podré quitarme las botas de agua y seguir con mi vida.

Y ya está.

Espero que hayas disfrutado de esta lectura en el último domingo del mes de junio. Quiero haceros partícipes de la ola de reciclaje doméstico sorteando una de las cosas que se nos han quedado huérfanas, una base de carga inalámbrica Spigen PowerArc ArcField (cargador no incluido). Para participar en el sorteo sólo tienes que expresarlo manifiestamente en los comentarios a través de la app o la web de Substack. Tenéis de plazo hasta las 17:46 del sábado 1 de julio. ¡Hasta la semana que viene!