Aparta de mí este viernes

Aunque el Black Friday es el próximo viernes, llevamos ya varios días, por no decir semanas, recibiendo en nuestros correos electrónicos asombrosos descuentos y despampanantes ofertas. Si eres como yo (y no me cabe la menor duda) verás estos días como una oportunidad de engrosar tu inventario tecnológico a un precio más contenido. No seré yo el que te aconseje que no compres tecnología, pero sí te quiero contar algunas de mis sensaciones en estas fechas, para ver si te pueden ser de ayuda. Mi mujer, Rocío, suele decirme que yo me lo compro todo y que no dejo lugar a que otros me regalen nada o a que los Reyes Magos puedan mostrarme su generosidad. Está claro que mis preferencias o necesidades son muy concretas y en ocasiones complejas, nada que pueda esperar que me sea regalado. ¿O tú estás esperando a que los Reyes te traigan el NAS de tus amores? Pese a todo, en los últimos años he querido ser sensible a su queja y acumulo para fechas señaladas aquellas cosas que me gustan o incluso necesito pero que pueden ser fácilmente regalables.

Aunque el Black Friday es el próximo viernes, llevamos ya varios días, por no decir semanas, recibiendo en nuestros correos electrónicos asombrosos descuentos y despampanantes ofertas. Si eres como yo (y no me cabe la menor duda) verás estos días como una oportunidad de engrosar tu inventario tecnológico a un precio más contenido. No seré yo el que te aconseje que no compres tecnología, pero sí te quiero contar algunas de mis sensaciones en estas fechas, para ver si te pueden ser de ayuda. Mi mujer, Rocío, suele decirme que yo me lo compro todo y que no dejo lugar a que otros me regalen nada o a que los Reyes Magos puedan mostrarme su generosidad. Está claro que mis preferencias o necesidades son muy concretas y en ocasiones complejas, nada que pueda esperar que me sea regalado. ¿O tú estás esperando a que los Reyes te traigan el NAS de tus amores? Pese a todo, en los últimos años he querido ser sensible a su queja y acumulo para fechas señaladas aquellas cosas que me gustan o incluso necesito pero que pueden ser fácilmente regalables.

Cuando llega el Black Friday pruebo mi propia medicina, y cuan amarga es. No hay nada que quiera o necesite que no tenga ya o que no esté reservada para los Reyes, por lo que me encuentro sin nada que comprar, sin ninguna oferta que buscar o aprovechar, algo que rechina en mi espíritu consumista. Así, acabo comprando cosas que no necesito y que apenas quiero simplemente por el hecho de que están rebajadas, para colmar la necesidad de aprovechar las rebajas. Un 10 para aquellos que venden y un 0 para mí, por supuesto. Pero esta es una historia de superación; ya llevo varios años consiguiendo contener mis impulsos, sólo comprando las (pocas) cosas que necesito y que tienen rebajas esta semana, un comportamiento que debería ser natural pero que a mí me cuesta horrores, como supongo también a otras personas.

Si ese es tu caso ¡puedes superarlo! Si yo lo he hecho, es algo que sin duda está al alcance de todo el mundo 😅

El Black Friday acecha 💸

Tomando nota 📝

Quizá mientras lees esto, yo estaré grabando, con unos amigos, un capítulo especial de Weekly que se publicará en unas semanas. Una de las cuestiones que les voy a plantear es qué usar para tomar notas rápidas, esos apuntes que necesitamos tomar en el día a día. Un usuario de productos Apple como yo debería usar Notas, pero la realidad es que sólo uso esta app en cuestiones relacionadas con la familia, dado que Rocío es una usuaria avanzada de Notas y tenemos una carpeta compartida que bulle de información. Para mis cosas, quizá debiera usar Obsidian, que no obstante es una app diseñada para recopilar conceptos, pero no me siento cómodo con su interfaz para tomar apuntes rápidos. Al final acabo usando OmniFocus que, si bien no es una app de notas, sí es donde desarrollo todo mi trabajo y mis tareas, y donde estas notas van a quedar vinculadas a proyectos. El problema es ése, precisamente; al quedar vinculadas a proyectos o tareas, esas notas desaparecen de mi vista cuando consigo culminarlos, perdiendo el aporte al conocimiento que podrían suponer. A ver si en este podcast encuentro la solución a mi problema.

Te libro de tu jefe (sí, estoy hablando en serio)

Soy Fran y tengo la forma de que le des una patada a tu jefe y trabajo actual para que por fin montes ese proyecto que tanto tiempo llevas pensando. Es aquí y si entras ahora te llevas un regalo para que vayas empezando.

Cementerios urbanos 🪦

Mi madre volvió anoche de Egipto y, como buen hijo, fui a recogerla a la estación de tren. La llevé rápidamente a su casa para que pudiera descansar, pero por el camino tuvo oportunidad de contarme algunas de las cosas que había visto. Para ella, una de las más sorprendentes fueron los kilómetros y kilómetros de calles, en la ciudad de El Cairo, formadas por cementerios. Sin duda, estos cementerios fueron en su momento construidos a las afueras de la ciudad, pero el crecimiento descontrolado y no planificado de la ciudad acabó por absorberlos y dejarlos incorporados completamente al núcleo urbano. Pero esto no queda ahí. Resulta que, habida cuenta de la pobreza reinante, lo que nosotros llamaríamos panteones se alquilan como viviendas a personas en estado de necesidad, personas que deben desalojar sus casas durante todo un día cada vez que se va a producir un nuevo sepelio. Existe una planificación urbanística para trasladar esos cementerios de nuevo a las afueras y realojar a los que allí están alquilados pero, dado que es un plan que requiere de muchos recursos económicos, su desarrollo está siendo extraordinariamente lento.

Y ya está.

Espero que hayas disfrutado de esta edición, que te llega inusitadamente tarde por motivos ajenos a mi voluntad. Ya sabes lo mucho que me gusta madrugar 😉